Acabo de leer un blog que comenta algo que me viene estupendamente para reflejar la situación en la que me encuentro, que no es ni más ni menos que me encuentro ante un dilema, sí, sí...., un dilema, porque como bien dice Paz Garde es la situación en la que te encuentras cuando tienes dos opciones que elegir.
Y la situación ante la que me encuentro en estos momentos no es ni más ni menos que después de mucho tiempo esperando me admiten en un curso que me interesa mucho "formador ocupacional", que como comprendereis trata de enseñar a dar una formación, normalmente relacionada con tu especialidad.
Estos cursos normalmente ya son complicados porque suele acceder a personas de muy diferente cualificación, pero justo en este área no importa demasiado este aspecto ya que sí son especilista en su área.
Cuál es mi sorpresa, que la formadora, no es una buena formadora, siendo un poco crítica, diria que le falta experiencia, y lo peor es que un poco de interés por mejorar.
Ante tal situación te hace volver a replantearte, de que sirven las cosas que se hacen, para que sirve tanto proceso de selección, tanto proceso de calidad interno, tanto papeleo y tanta burocracia, si finalmente no se tiene a gente preparada.
Mientras que la gente que no tiene formación suficiente, y se supone que va a aprender finalmente no lo aprenderá y no podrá sacarle el partido que pretende.
Por tanto, nadie cumple su objetivo, habiendo gastado un dinero que no ha sido lo suficientemente productivo, y por tanto encubriendo un servicio que no está funcionando en algunos casos.
El problema es que seguimos siendo poco críticos y no somos capaces de decir las cosas como son, porque toda la burocracia que existe al final nos la saltamos a la torera siendo condescendientes.
Y mi dilema es, debería de decir que esta persona no está lo suficientemente preparada, o debo de ser tolerante y darle la oportunidad que a base de experiencia mejore. ¿ Qué opinais vosotros?
